enero 04, 2012

Primeras Impresiones

Detesto con toda mi alma el primer encuentro. No sé que le ven de romántico o de interesante a la incómoda situación de verse por primera vez con una persona que no sabemos si saldrá corriendo, se sentirá atraída o simplemente mirará el reloj por momentos para saber cuanto falta para terminar con esto.

La tortura comienza junto con los preparativos. Mientras elijo que ropa voy a ponerme me atormenta el fantasma de la tan temida primera impresión: esa mirada fulminante que dura un segundo y nos acompaña por el resto de nuestras vidas. Alguien que en los primeros minutos de la cita parezca un idiota, probablemente lo sea... pero también puede resultar todo lo contrario. Entonces, la primera impresión es algo a tener en cuenta, o es simplemente una leyenda?


Suelo ser puntual al extremo de llegar siempre temprano, porque detesto llegar tarde. Eso suma expectativas porque la espera hace que aumente la ansiedad. Camino de un lado a otro, escucho música en mi mp4, espero que llegue la hora pactada. Luego hay que determinar el grado de confianza, porque si soy demasiado efusivo puedo quedar como la ramera del pueblo, y si actúo distante puedo parecer frío y desinteresado.

A veces miro a los ojos a la otra persona y creo que todo está saliendo bien, pero cuando no vuelve a llamarme me doy cuenta de que esa cara era el equivalente a "voy a poner buena cara asi me lo saco de encima pronto". Tengo tantos "te voy a llamar" en mi placard que si fuese más ingenuo me quedaría eternamente encerrado en casa esperando que suene el teléfono.
Tanto en un trabajo como en una pareja, o en un grupo de amigos, definitivamente lo más difícil y lo más importante es saber encontrar al indicado.

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